Se buscan responsables

A finales del siglo XX, las corrientes psicológicas y sociológicas se centraron en hacernos creer que la culpa de todo lo que nos pasa es de alguien más. Los padres, los abuelos, los vecinos, las exparejas, los compañeritos del colegio o el profesor sarcasmo; como si existiera una conspiración mundial en nuestra contra.